En un descubrimiento revolucionario, los científicos han sintetizado un metal súper duro fusionando titanio y oro, creando la sustancia metálica más dura conocida que también es compatible con los tejidos vivos.Esta revelación proviene de un equipo de físicos estadounidenses, según lo publicado en la estimada revista,Los avances de la ciencia.

La aleación, conocida como beta-Ti3Au, se promociona como cuatro veces más dura que el titanio puro, anunciando una nueva era para los implantes médicos que podrían durar mucho más que el estándar actual.Emilia Morosan de la Universidad Rice, Houston, encabezó la investigación, inicialmente dirigida al desarrollo de imanes no convencionales.

Lo que distingue a esta aleación no es solo su dureza sin precedentes sino también su biocompatibilidad superior, lo que la convierte en un candidato ideal para implantes dentales, reemplazos articulares,y posiblemente extendiéndose a aplicaciones en las industrias de perforación y artículos deportivos.

Derivada de una estructura única de compuestos cúbicos formados a altas temperaturas, la aleación titanio-oro representa un avance significativo tanto en ciencia de materiales como en tecnología médica.Con la conocida compatibilidad del titanio con los huesos humanos, esta aleación promete mejorar la longevidad y fiabilidad de varios implantes.